China rechazó los dichos del director del FBI, Christopher Wray quien sostuvo que el “COVID-19 pudo haber sido provocada por un virus que se filtró de un laboratorio chino”.
Por Fabián Pizarro
China rechazó tajantemente los dichos del director del FBI, Christopher Wray quien sostuvo que el “COVID-19 pudo haber sido provocada por un virus que se filtró de un laboratorio chino”.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning, dijo que la “Es extremadamente improbable que el COVID-19 saliera de un laboratorio”, pero además sostuvo que “Al repetir la teoría de las fugas de laboratorio, Estados Unidos no logrará desacreditar a China y, en cambio, solo dañará su propia credibilidad”, dijo Mao.
“Instamos a EEUU a que respete la ciencia y los hecho y deje de convertir el rastreo de origen en algo sobre política e inteligencia, y deje de perturbar la solidaridad social y la cooperación sobre los orígenes”, dijo.
En una entrevista con Fox News que se transmitió el martes, Wray dijo: “El FBI ha evaluado durante bastante tiempo que los orígenes de la pandemia probablemente sean un posible incidente de laboratorio en Wuhan (en el centro de China)”.
“Aquí estás hablando de una posible fuga de un laboratorio controlado por el gobierno chino”, dijo Wray.
Refiriéndose a los esfuerzos para rastrear el origen del coronavirus, agregó: “Solo haré la observación de que el gobierno chino, me parece, ha estado haciendo todo lo posible para tratar de frustrar y ofuscar el trabajo aquí, el trabajo que nosotros estamos haciendo, el trabajo que nuestro gobierno de EE. UU. y socios extranjeros cercanos están haciendo. Y eso es desafortunado para todos”.
El martes, Mao rechazó un informe del Departamento de Energía de EEUU que evaluó con “baja confianza” que el virus que se detectó por primera vez en Wuhan a fines de 2019 se filtró de un laboratorio gubernamental cercano.
El informe no se ha hecho público y los funcionarios en Washington enfatizaron que las agencias estadounidenses no están de acuerdo sobre el origen del virus.
Mao insistió el martes en que China ha sido "abierta y transparente" en la búsqueda de los orígenes del virus y ha "compartido la mayor cantidad de datos y resultados de investigación sobre el rastreo de virus y ha hecho importantes contribuciones a la investigación mundial de rastreo de virus".